Esencia concentrada hidratante y nutritiva formulada con mucina de caracol y veneno de abeja.
El veneno de abeja es conocido en cosmética por sus propiedades antiedad y antisépticas. La mucina de caracol tiene propiedades regeneradoras y cicatrizantes, por lo que hace de esta esencia un tratamiento ideal para pieles dañadas.
Ayuda a mejorar el aspecto de la piel y tras su uso conseguiremos una piel mucho más sana y cuidada. Las células de nuestra piel se regeneran con más facilidad y dan como resultado una piel más lisa y suave.
Calma y suaviza pieles irritadas a la vez que protege la piel de los daños causados por agentes externos.